UNA MUJER PERSUADIDA POR EL ENEMIGO
“Pero temo que como la serpiente con su astucia engañó a Eva, vuestros sentidos sean de alguna manera extraviados de la sincera fidelidad a Cristo”
2 Corintios 11:3
En el devocional desarrollado el día de ayer estudiamos la forma en que Dios hizo a Eva y cuál fue su propósito al crearla; de lo cual se pudo concluir que como mujeres debemos mantener la convicción del valor que nuestro Hacedor nos ha dado y el objetivo que tiene con y a través de nuestras vidas.
Una de las finalidades del escrito de hoy, es exponer un poco como era el ambiente donde la primera mujer de la humanidad vivió. El libro de Génesis habla claramente acerca del huerto del Edén, lugar donde Adán y Eva fueron puestos, rodeados de hermosos árboles que producían frutos deliciosos, ríos que bañaban el huerto, animales con los cuales podía convivir y lo más sorprendente de todo era que tenían una relación íntima y cercana con su Creador, hasta el punto de poder sentir su voz de manera audible. No obstante, uno de los mensajes que los embajadores de la humanidad recibieron de parte de su Hacedor fue el siguiente:
“Y mandó Jehová Dios al hombre, diciendo: De todo árbol del huerto podrás comer; mas del árbol de la ciencia del bien y del mal no comerás; porque el día que de él comieres, ciertamente morirás”
Génesis 2:16-17
Lamentablemente, Eva, quien seguramente estaba acostumbrada a escuchar a Dios, le dio acceso a otra voz en su vida, aquella voz que le incitó a la desobediencia para que de la misma forma persuadiera a su esposo.
“Pero la serpiente era astuta, más que todos los animales del campo que Jehová Dios había hecho; la cual dijo a la mujer: ¿Conque Dios os ha dicho: No comáis de todo árbol del huerto?
Y la mujer respondió a la serpiente: Del fruto de los árboles del huerto podemos comer; pero del fruto del árbol que está en medio del huerto dijo Dios: No comeréis de él, ni le tocaréis, para que no muráis.
Entonces la serpiente dijo a la mujer: No moriréis; sino que sabe Dios que el día que comáis de él, serán abiertos vuestros ojos, y seréis como Dios, sabiendo el bien y el mal.
Y vio la mujer que el árbol era bueno para comer, y que era agradable a los ojos, y árbol codiciable para alcanzar la sabiduría; y tomó de su fruto, y comió; y dio también a su marido, el cual comió así como ella”
Génesis 3: 1-6
¿Sabes qué consecuencias trajo para Eva, su esposo y el resto de la humanidad, su desobediencia al haber escuchado una voz diferente a la de su Dios?, la respuesta es que fuimos destituidos de la Gloriosa presencia de nuestro Creador, porque esta es la paga del pecado; razón por la que Dios tuvo que entregar a su único hijo a una muerte que solo merecíamos tú y yo, para reconciliarnos con ÉL y su diseño original.
“Un hombre desobedeció a Dios e hizo que muchos llegaran a ser pecadores, pero de la misma manera un solo hombre obedeció a Dios y así hizo que muchos fueran aprobados por Dios”
Romanos 5:19 (PDT)
No sé cuantas veces la voz de Dios te ha dicho: vuélvete a mí, escudriña mis escrituras, entrégame el dominio de tu vida, obedéceme; pero tú corazón se ha endurecido y has preferido escuchar otras voces, la autosuficiencia o la liberación femenina quizás. Recuerda que ninguna voz diferente a la de Jesús conduce a la vida eterna.
¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna.
Juan 6:68b
Así como la serpiente (satanás) engañó a Eva, él pretende hacerlo contigo y conmigo, él está al asecho buscando persuadirnos para que nos desenfoquemos del propósito original por el cual fuimos creadas. TEN CUIDADO.
Dios te bendiga.
2 comentarios:
Estando persuadidos de que el que comenzó la obra en nosotros, la perfeccionará hasta la venida de Jesucristo.
Sólo la voz de Dios. Amén.
Bendiciones
Amén. Aleluya. Un saludo mi hermana.
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