¡LO QUE QUERÍA!

Septiembre 21 de 2020


¡LO QUE QUERÍA!


“Le has concedido el deseo de su corazón,
Y no le negaste la petición de sus labios” 

Salmos 21:2 


Si hay algo que me asombra de Dios, es que ÉL siendo supremo se fije en mí que soy una simple mortal, estando atento a mis deseos y peticiones, dándome la respuesta en tiempo record. 


Lo anterior, se ha convertido en un argumento que suelo utilizar en momentos de necesidad. Hay situaciones que nos hacen tambalear, luchas continuas y necesidades no resueltas, ante la angustia que esto genera, hay una herramienta muy efectiva para hallar paz y confianza: Recordar aquellas veces en las que Dios concedió el deseo de nuestro corazón y no negó las peticiones de nuestros labios. El Dios que intervino ayer, es el mismo de hoy. 


Mi hija Susana, me ha dado grandes lecciones al respecto, cuando ha recibido un detalle de mi parte o de su padre, grita repitiendo sin cesar ¡LO QUE QUERÍA, LO QUE QUERÍA!, esto además ha generado en ella una confianza tan grande, en nosotros, que cree ciegamente que podemos proveerle en alguno de sus deseos y sin preguntarse si poseemos dinero o no, escuchamos de sus labios constantemente: mamá, papá me lo compran por favor, acudiendo a nosotros con la firme esperanza que ahí estamos para ella; por supuesto, le hemos enseñado que es Dios quien obra a través de sus padres. 


Recordar que Dios estuvo ahí, respondiendo a nuestros deseos, dificultades y necesidades, es un antídoto efectivo contra el desánimo y la falta de fe, no olvides cuando ÉL concedió lo que tanto querías. 



Dios te bendiga.


Alejandra Bustamante




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